Medios de comunicación social y cultura

La lectura de Matas habla de la industria multimedia, de cómo empezó su desarrollo en España, como se concretó en Cataluña, de su lucha por hacerse un lugar en el mercado, de como apenas sobrevive y de cual puede ser su futuro.
En los primeros años de creación de productos multimedia hay una verdadera explosión de creatividad, pero las ventas no cubrían los elevados costes de producción y este mercado cultural no avanzó.Los motivos han sido muy variados:
Algunas editoriales apostaron por los productos multimedia pero Internet ha sido una gran competidora porque no se ha conseguido que los usuarios paguen por los contenidos que pueden encontrar facilmente en la Red.
También se pensó que la televisión interactiva ayudaría a esta industria pero no ha sido así y la televisión interactiva no acaba de arrancar con la fuerza neceraria.
Otro factor en contra ha sido la colonización cultural de los fenómenos globales, que puede con los artistas, los emprendedores y las pequeñas empresas.
Los estamentos públicos tampoco han ayudado al desarrollo de la industria multimedia en nuestro pais.
Por todo ello la creación comercial de productos multimedia en nuestro país se acaba, cuando en este momento las horas que los chicos pasan delante de la pantalla del ordenador son tantas como las horas que pasan frente a la televisión.
Hacer buenos productos culturales multimedia es posible, pero como con cualquier otro producto comercial hay que apostar por ello y conseguir llevarlo al mercado y venderlo. Esto es lo complicado, se necesitan muchos medios publicitarios, bajos costes de producción, distribución, venta en pequeños y grandes comercios.... y esto no se ha logrado. En los centros educativos no ha calado del todo, aunque se han comprado enciclopedias, actividades interactivas para utilizar en algunas asignaturas.... Aún así su consumo no es grande y efectivamente se trata de una industria poco productiva, por eso está en declive.
Yo opino que efectivamente usamos poco los recursos multimedia, las editoriales deberían trabajar más en ello, investigar mas e insisitir en los centros. Ahora con la pizarra digital se están utilizando más recursos, pero debemos mejorar aún. También sería bueno algo de ayuda estatal, una subvención para la enseñanza, para actualizar, mejorar e instalar equipos. Las empresas empresas de material educativo no deberían ser como las fábricas de coches, su material es más delicado.