Como en todos los conflictos, no existe el poseedor de la verdad absoluta. En el artículo se muestra el punto de vista de los anunciantes, de los consumidores y de los técnicos de la publicidad y todos tienen parte de razón.
Los anunciantes, productores y dsitribuidores tienen un código de autorregulación de sus actividades, que parece ser funciona bastantes veces y efectivamente, aunque sólo sea por motivos económicos, las empresas no quieren que sus campañas sean retidadas.
Los consumidores queremos que la información sea veraz, para poder elegir con conocimiento y responsabilidad .
Las empresas de publicidad también defienden sus intereses, la protección de la creatividad que es a la larga lo que las hará mas competitivas.
Por supuesto también hay condiciones a cumplir inamovibles : protección del menor, lucha contra el seximo....
Todos estos puntos de vista a veces entran en conflito en determinados trabajos, entonces hay que tomar una decisión, lo ideal sería que la decisión se tome conjuntamente por empresas, consumidores, publicistas y administración. Pero es difícil ponerse siempre de acuerdo, entonces debe actuar la justicia .
Quizá sería bueno para resolver estos conflictos que cuando se publicite un objeto y no se pueda dar una información pormenorizada y farragosa del producto, sí se dé la posibilidad de consultar esa información detallada, dando obligatoriamente una indicación de donde encontrarla ( página web, bancos de datos.....)
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